Nilo: el pequeño gatito que decidió salir de la calle.

Nilo es un gatito de unos seis meses, de color pardo azulado, muy guapo y con carita dulce. 

Su vida empezó de la manera más dura: en un polígono industrial, donde cientos de gatos se buscan la vida entre la basura de las fábricas.

La vida en la calle es cruel, especialmente cuando tienes hambre y nadie te mira, eres invisible. No importas, no existes, no estás ahí. Nilo estaba muy delgado, y su futuro parecía ser solo sobrevivir un día más. Rodeado de camiones, coches y sin comida. Sin futuro.

Ana tenía turno de tarde y salió de trabajar de noche, cansada y con ganas de llegar a casa. Al llegar a su coche vio un grupo de gatos. Solo uno, pequeño y gris, la miró fijamente. Sin nada para darle, Ana volvió a casa con esa imagen clavada en la cabeza.

No dejaba de pensar en él. Casi a medianoche, volvió al polígono con comida y un transportín. El pequeño Nilo decidió ese día que quería otra vida: casi se subió al coche sin dudar. Entró solito al transportín. Tenía hambre, sed. 

Ahora está a salvo, recuperando peso y viviendo en acogida con Ana. Ya con el tema veterinario al día, va cogiendo peso. Espera a su familia definitiva, que quizá no llegue pronto porque no es un gatito naranja ni diminuto. Pero Nilo es sociable, cariñoso y sabe que merece un hogar. Le gustan los gatos, los perros, la gente, los mimos... es tan agradecido, tan noble...

                                                         

Mirar para otro lado es lo fácil. Subes al coche, vuelves a casa, y a otra cosa. Pero párate, míralos a los ojos y piensa en la cantidad de vidas que podrían salvarse con un poco de atención y empatía. 

Adoptar no solo cambia la vida de un animal, cambia la nuestra.


Salva vidas. No mires para otro lado.

Y si crees que tú puedes ser el hogar que Nilo espera, escríbenos: 4catsvlc@gmail.com 




Comentarios

  1. Podría ser perfectamente un cuento para niños, pero no es un cuento, es una historia real. Una preciosa historia, como tantas otras de las que formáis parte. Historias con las que cambiáis el mundo de estos pequeños seres. Gracias, gracias y mil gracias! Y toda la suerte del mundo para Nilo!

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